Laura Escanes se quita la ropa para dar que hablar a sus detractores

En Instagram

La 'influencer' catalana ha querido dar motivos para hablar a los que la critican a diario por cómo viste y lo que hace

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Judith del Rio

Laura Escanes lleva algún tiempo limitando su exposición en redes para proteger su salud mental al reconocer tener miedos e inseguridades que le llevaron a pedir ayuda psicológica. Además de intentar gestionar sus emociones de manera positiva, la influencer tiene que lidiar prácticamente a diario con el ataque y los insultos de algunos usuarios que se esconden tras perfiles anónimos para hacerle la vida imposible; y cuyo pasatiempo favorito es criticar cómo ejerce Laura como madre de su pequeña Roma, fruto de su matrimonio con Risto Mejide.

Parece que la llegada de la pequeña supuso algo determinante para algunos usuarios de las redes sociales, porque la influencer recibe todo tipo de críticas por cada decisión que toma, desde llevarla o no a la guardería o lo que come. Sin embargo, lo que más le duele es que le critiquen a ella como madre, cuando hace todo y más por su pequeña. Una de las principales críticas suele ser cómo va vestida o su comportamiento en redes sociales, que algunos consideran inmaduro y poco apropiado para una joven que ya es madre.

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A estos detractores, que critican cosas tan triviales como que Laura decida aparecer con una camiseta de tirantes o que esté aprendiendo danza contemporánea, ha dedicado una de sus últimas publicaciones, en las que aparece ataviada con ropa interior, decidida a dar que hablar a los más críticos.

“Pero, ¿qué van a pensar cuando vean estas fotos? ¿Por qué subes estas fotos y estos vídeos insinuando? Cuanto tu hija sea mayor y vea las tonterías que subes…”, escribe la influencer, haciendo referencia a los comentarios de odio que recibe a diario en Instagram.

Su declaración de intenciones ha causado sensación, con multitud de compañeras que han aplaudido sus palabras, como Madame de Rosa, que también ha denunciado en múltiples ocasiones el acoso que sufre en redes por su físico, o Mar Torres, que hace unos meses rompía a llorar en Instagram por culpa de estos usuarios sin nada mejor que hacer que atacar a otras personas.

De momento, la joven catalana continúa yendo a terapia y dedicada por completo tanto a su vida familiar como a sus negocios en redes sociales y belleza. Sobre todo, trata de aprender paso a paso: “Las cosas no salen como planeamos y de esos errores es de los que más aprendemos. Es algo que me repito bastante para relativizar lo que pueda pasar”, aseguraba a sus seguidores hace unas semanas.

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